
Y es ahora cuando pensáis, ¿pero, pero, pero... de que mierda nos habla éste hoy? Eh eh eh, tranquilos, esto es un tema muy interesante. A mi no solo me gusta decir tacos, meterme con el hijo de puta de Rajoy y hablar de penas, amores, y música. También me gusta la ciencia, me interesan cientos de temas. Uno de ellos es sin duda el universo, el universo en toda su totalidad. Desde niño me ha fascinado el espacio, las estrellas y planetas. La posibilidad de viajar por el, de encontrar vida inteligente en alguna parte.
El caso es que recuerdo cuando iban a poner en funcionamiento el LHC, que salieron algunos diciendo que eso provocaría un agujero negro que se nos tragaría y destruiría. Y la verdad, es que si miras el mundo, no sé, creo que no estaría mal que eso pasara. Pero bueno, no quiero ponerme pesimista sobre el ser humano, que oye, no todos son malos, mentirosos y cabrones, siempre se salva alguien.
Pero pusieron el LHC en marcha y ni hubo agujero negro, ni explotó nada, ni se extinguió la raza humana. El año pasado incluso confirmó la existencia del bosón de Higgs, que es una de las cosas para lo que fue creado el colisionador. Y os preguntaréis, vale vale, pero ¿por qué coño nos hablas de esto ahora? Pues porque a veces la rabia me invade. Y cuando eso ocurre, fundo luces, farolas, cargo pilas, y siento como un hormigueo recorre cada vena de mi cuerpo. Y a veces y solo a veces, creo que podría alcanzar los 0.9 TeV (teraelectronvoltios) que parece que marcó como récord el colisionador.
¿No habéis sentido nunca esa sensación de en un momento dado ser capaces de derribar un edificio de un solo puñetazo? Yo si, e incluso lo he probado y la verdad, acabé con un dolor de mano bastante importante. Una cosa es lo que sientas que eres capaz de hacer, y otra muy distinta lo que seas capaz.
Es como Rajoy, pensó que era capaz de hacernos creer que no era imbécil, pero otra cosa muy distinta es lo que ha demostrado. Y así con todo.

Seré yo y mi ira, mi amor y mi tristeza, en un día de rabia una noche cualquiera, tal vez una noche de sábado. Ya veréis ya.