miércoles, 26 de marzo de 2014

Morirse

Si fueras a morir dentro de una hora, ¿Que harías durante tus últimos sesenta minutos? ¿Estar con la gente que quieres? ¿Escuchar música? ¿Comerte un buen filete? ¿Hacerte unas rayas? ¿Follar? ¿Hacer el amor? ¿Pedir perdón? ¿Reír? ¿Llorar? ¿amar? ¿Volar? ¿Gritar?... ¿Vivir?
Tal vez hasta podrías hacer todo a la vez.

Si la respuesta es que querrías hacerlo todo, que te faltaría tiempo, que menuda putada porque no sabrías si decidirte entre el filete o follar (cosa que no te crees ni tú), creo que deberías pensar ahora mismo en porqué no estás haciendo el amor. Yo me lo pregunto. ¿Por qué cojones estoy escribiendo esto, cuando quiero amar y ser amado? ¿Por qué estoy perdiendo el tiempo sentado en esta silla, cuando querría estar revolcándome en el suelo contigo?.

¿Te das cuenta? Tenemos una vida que no vivimos. Esa última hora no creo que te la pasases en el trabajo. Ni en un atasco. Ni tan siquiera perderías el tiempo odiando a nadie, ni pensando en todas las mentiras. Tampoco te lamentarías por lo que no te has atrevido a hacer. Con una hora por delante y luego la nada, te atreverías a todo. 

Cambia esos sesenta minutos, por sesenta años. Y pregúntate que coño haces perdiendo el tiempo leyendo esto, en lugar de estar viviendo.

1 comentario:

  1. ¡¡Pues yo prefiero el filete!! Ahora en serio, solo dices verdades. Yo quiero que alguien me escriba algo así.

    ResponderEliminar